En el término municipal de Llagostera (Girona), a 10km. de las míticas playas de la Costa Brava, se halla Can Gascons, un paraje de 80 hectáreas aislado y sin urbanizaciones colindantes, lo que le confiere un reposo y silencio absoluto. Desde la misma, se divisan las cumbres nevadas del pirineo catalán con el mítico Canigó, el macizo de las Gabarras y toda la sierra del Montseny. La finca se encuentra rodeada de verdes prados solamente interrumpidos por la presencia del ganado de una gran belleza bucólica, todo ello envuelto por cuidados bosques de robles, encinas y alcornoques.